Ciudad sostenible: qué es y ejemplos de modelos urbanos

¿Alguna vez te has preguntado cómo sería vivir en una ciudad donde la sostenibilidad es la clave para el bienestar de todos?  

En este artículo, conoceremos el significado detrás de este concepto, exploraremos las innovadoras prácticas que están transformando nuestros entornos urbanos y te presentaremos ejemplos concretos de modelos que están marcando la pauta. 

Desde las vibrantes calles de Barcelona hasta la eficiencia nórdica en Copenhague, descubriremos cómo estas ciudades están abrazando la sostenibilidad en todas sus facetas: desde el transporte hasta la gestión de residuos, pasando por el diseño de espacios públicos. 

¿Listo para descubrir cómo estas ciudades están construyendo un futuro más verde y habitable para todos? 

Qué es una ciudad sostenible 

En la búsqueda constante de un equilibrio armonioso entre el desarrollo urbano y la preservación del medioambiente, surge el concepto de ciudad sostenible. 

En sí, se trata de un proyecto de urbanismo integral para la creación de ciudades inclusivas, seguras, resilientes y sostenibles con el objetivo de contrarrestar la planificación urbanística deficiente y procurar la accesibilidad a la vivienda y a servicios asequibles. 

También una ciudad sostenible es mucho más que edificios verdes y energías renovables. Se trata de un tejido urbano donde se unen la eficiencia energética, la movilidad sostenible, la gestión inteligente de residuos y la inclusión social.  

En la esencia de estas urbes resuena la importancia de reducir la huella ecológica. La gestión inteligente de los recursos es clave; desde la implementación de tecnologías para el ahorro de energía hasta estrategias innovadoras para el tratamiento de aguas residuales. 

Es más, la sostenibilidad no solo se vive, se planifica y se gestiona con miras a preservar la biodiversidad y mantener el equilibrio ecológico. 

Características de una ciudad sostenible 

Vamos juntos a descubrir las características que definen el corazón de las ciudades sostenibles:  

• Acceso a recursos públicos básicos. El proyecto garantiza a sus habitantes educación, centros de salud adecuados, transporte, recogida de basuras, seguridad y buena calidad del aire, entre otros aspectos. Es decir, aquello que es indispensable para su supervivencia.
• Acciones de renovación urbana. Esto implica adaptación de calles, plazas, parques y del espacio en general.
• Transporte sostenible. El objetivo en este caso es crear sistemas de transporte de fácil acceso, además de mejorar la seguridad vial de las ciudades a través de los PMUS (Planes de movilidad urbana sostenible).
• Gestión adecuada de residuos. Deben implementar soluciones para el manejo de residuos, con el fin de minimizar la contaminación y optimizar la calidad de vida de sus habitantes.
• Planificación eficiente. Una ciudad sostenible empieza con una planificación urbana inteligente que facilita la movilidad y conectividad entre diferentes áreas, reduciendo la necesidad de transporte motorizado.
• Energía renovable. Opta por fuentes como la solar y eólica, para disminuir la dependencia de combustibles fósiles y asegurar un acceso de energía más limpia y sostenible.
• Arquitectura verde. Edificaciones ecológicas, construidas con materiales reciclados y tecnologías eficientes, no solo minimizan el impacto ambiental, sino que también generan espacios habitables y visualmente atractivos.
• Equidad social. Implementa políticas urbanas inclusivas que aborden las disparidades sociales, garantizando que los beneficios de la sostenibilidad sean accesibles para todos los estratos sociales.
• Resiliencia climática. Desarrolla estrategias de adaptación y mitigación para enfrentar los desafíos climáticos, protegiendo la ciudad de eventos extremos y asegurando su sostenibilidad a largo plazo. 

 Cómo adaptar la ciudad para que sea sostenible 

Cada planificación estratégica se convierte en un paso más cerca de ciudades que no solo se adaptan al presente, sino que también lideran el camino hacia un futuro sostenible: 

1. Movilidad. Transforma la infraestructura vial, priorizando peatones, ciclistas y transporte público, reduciendo así la dependencia de vehículos individuales y promoviendo opciones más ecológicas.
2. Energía limpia. Integra fuentes de energía renovable, como paneles solares y turbinas eólicas, en la matriz energética de la ciudad para reducir las emisiones de carbono y avanzar hacia un suministro más limpio y sostenible.
3. Edificaciones. Fomenta la construcción de estructuras sostenibles con tecnologías que optimicen el consumo de energía, como sistemas de iluminación LED, aislamiento térmico y diseño arquitectónico orientado a la eficiencia.
4. Residuos. Implementa sistemas de clasificación y reciclaje efectivos, incentivando a la comunidad a reducir, reutilizar y reciclar, disminuyendo así la cantidad de desechos enviados a vertederos.
5. Espacios verdes. Aumenta la cantidad de áreas verdes en la ciudad, creando parques, jardines y corredores naturales que no solo mejoran la calidad del aire, sino que también ofrecen lugares de recreación para la comunidad.
6. Infraestructura resiliente al clima. Desarrolla estructuras urbanas que puedan resistir eventos climáticos extremos, como inundaciones o tormentas, para asegurar la resiliencia de la ciudad ante el cambio climático.
7. Participación comunitaria. Fomenta la colaboración entre los ciudadanos y las autoridades locales en la toma de decisiones relacionadas con el desarrollo sostenible, asegurando que las soluciones sean inclusivas y reflejen las necesidades de las personas.
8. Tecnologías limpias. Apoya su adopción en sectores como el transporte y la industria, reduciendo así las emisiones contaminantes y promoviendo prácticas más sostenibles. 

Ideas para una ciudad sostenible 

• Priorizar el urbanismo regenerativo. En lugar de construir nuevas infraestructuras, se debe buscar la manera de aprovechar las que ya existen y recuperar los barrios en los que no hay gente y las casas vacías.
• Incrementar la eficiencia de los recursos. Se debe buscar la forma de mejorar las edificaciones y conseguir la eficiencia de los recursos como el agua o la luz. Si esta idea se consigue, las ciudades serán más sostenibles, logrando mayor bienestar para la ciudadanía y el medioambiente.
• Uso del transporte. El empleo excesivo del transporte es la principal causa del calentamiento global. Por este motivo, es necesario inclinarse por la bicicleta o ir a pie. 

Del mismo modo, podemos ver que cada vez hay mayor interés por parte de la ciudadanía en el uso de vehículos eléctricos que utilizan energías renovables. 

• Cuidar la biodiversidad urbana. Es muy importante concienciarse; algunas de las cosas que podemos hacer para ayudar es consumir productos sostenibles, apoyar a las asociaciones conservacionistas o actuar de manera responsable con el medio.
• Contar con la participación de los ciudadanos. Por este motivo, las instituciones deben apoyar a los ciudadanos para que sigan las recomendaciones de los expertos: evitar el uso excesivo del transporte, reciclar y reutilizar los residuos, consumir lo necesario y reducir el consumo de agua y luz para apostar por el ahorro de energía y la utilización de fuentes renovables.
• Implantar modelos enfocados a la sostenibilidad. Las ciudades sostenibles deben ser capaces de desarrollarse bajo criterios ecológicos y de igualdad social.  

Ejemplos de ciudad sostenible 

Hay varios ejemplos de ciudades sostenibles en España y en el mundo que han implementado diversas prácticas y proyectos para promover la sostenibilidad ambiental, social y económica. A continuación, te presento algunos ejemplos: 

• Zurich, Suiza. Es una ciudad que ha logrado un equilibrio entre la calidad de vida y la sostenibilidad. Ya que ha implementado medidas para reducir la emisión de gases de efecto invernadero, fomentar el uso de bicicletas y transporte público, y mejorar la eficiencia energética de los edificios.
• Barcelona, España. Ha cerrado ciertos bloques al tráfico de vehículos para crear espacios peatonales y áreas verdes. Esto reduce la contaminación del aire, fomenta la movilidad sostenible y mejora la calidad de vida de los residentes.
• Copenhague, Dinamarca. La ciudad ha desarrollado extensas redes de carriles para bicicletas, estacionamientos seguros y semáforos adaptados para fomentar el uso de la bicicleta como medio de transporte, reduciendo así las emisiones de carbono y promoviendo un estilo de vida activo.
• Estocolmo, Suecia. Ha desarrollado un sistema de gestión de residuos eficiente que involucra la recogida selectiva y la generación de energía a partir de ellos.
• Medellín, Colombia. Ha transformado áreas urbanas desfavorecidas a través de proyectos como los “parques biblioteca”, que ofrecen espacios culturales y educativos en comunidades vulnerables. Además, ha mejorado su sistema de transporte público, incluyendo de teleféricos, lo que contribuye a una movilidad más sostenible.
• Reikiavik, Islandia. Utiliza la energía geotérmica para calefacción y electricidad, reduciendo significativamente su dependencia de combustibles fósiles y disminuyendo las emisiones de gases de efecto invernadero.
• Curitiba, Brasil. Es pionera en el uso de sistemas BRT, un enfoque eficiente y sostenible para el transporte público. Este sistema ha mejorado la movilidad urbana, reduciendo la congestión del tráfico y opciones más accesibles y respetuosas con el medioambiente. 

Conclusión

Recuerda, cada acción cuenta. Pequeños cambios pueden tener un gran impacto, y las lecciones que hemos aprendido de ciudades como Barcelona, Copenhague, y tantas otras, nos inspiran a imaginar un mundo donde la sostenibilidad es la norma. 

Ahora, te invitamos a compartir este conocimiento. Juntos, podemos difundir la importancia de construir ciudades que no solo crezcan, sino que florezcan en equilibrio con la naturaleza. 

Este artículo se ha realizado en el marco de la Resolución de IVACE de concesión de una subvención al Consejo de Cámaras de la Comunitat Valenciana, para el fomento de la Sostenibilidad y Desarrollo Sostenible en el año 2024