La transición a una economía circular, en la que las empresas recuperan, reutilizan o reciclan los recursos, no ha estado exenta de obstáculos hasta ahora. El escaso valor de los productos usados y los elevados costes de separar y procesar los materiales son algunos de ellos.

Vivimos en un planeta con recursos finitos y la idea de implantar procesos basados en la economía circular es muy atractiva. Sin embargo, no podemos engañarnos, la economía circular debe ser rentable para ser funcional. Para ello contamos con una poderosa herramienta, la Inteligencia Artificial. La IA puede aliarse con el talento humano para hacer posible una economía regenerativa mucho más eficiente.

A través de este artículo analizaremos algunos ejemplos de cómo aprovechar esta herramienta al servicio de la economía circular:

1. Optimización de recursos: porque la IA puede analizar grandes volúmenes de datos para identificar patrones y optimizar el uso de recursos finitos, reduciendo el desperdicio y mejorando la eficiencia en la producción y el consumo.

2. Diseño sostenible: Mediante algoritmos de aprendizaje automático, la IA puede ayudar a diseñar productos y sistemas más sostenibles. Los nuevos productos promoverán la reutilización y el reciclaje de materiales.

3. Agricultura regenerativa: La IA puede mejorar las prácticas agrícolas analizando los datos del suelo, el clima y las plantas. Esto ayudará a los agricultores a tomar decisiones más informadas basadas en el análisis de datos para regenerar los ecosistemas al tiempo que aumenta la biodiversidad.

4. Energías renovables: La IA puede optimizar la generación y distribución de energías renovables.

5. Economía circular: La IA puede facilitar la transición hacia una economía circular mejorando la gestión de residuos, optimizando la cadena de suministro y creando nuevos modelos de negocio que promuevan la reutilización y el reciclaje de recursos.

Estas aplicaciones no sólo ayudan a reducir el impacto medioambiental, sino que también pueden generar importantes beneficios económicos y mejorar la calidad de vida de las personas y su entorno.

Centrándonos en el caso de la Economía Circular, podemos poner algunos ejemplos de casos de éxito en los que la aplicación práctica de la IA en los procesos productivos ha facilitado la transición de estas empresas hacia una economía circular:

1. Apple: Utiliza actualizaciones de software para mantener el valor de los iPhones en el mercado de segunda mano, de esta manera sus productos resultan más perdurables en el tiempo y por tanto, más sostenibles.

2. SXD Zero Waste: Aplica la IA para rediseñar prendas con menos desperdicio de material.

3. Interface: Esta empresa de alfombras ha puesto en marcha un programa de reciclaje al final de la vida útil de sus productos, utilizando IA para optimizar el proceso de recuperación de materiales.

4. SuperCircle: En la industria de la moda, SuperCircle utiliza infraestructura digital e IA para gestionar la circularidad de las prendas, mejorando la trazabilidad y el reciclaje de materiales textiles.

5. Norsk Gjenvinning: Esta empresa noruega utiliza robots con visión artificial para clasificar residuos de construcción y demolición, recuperando materiales valiosos como madera, metales y plásticos.

6. Planta de clasificación de envases ligeros Hostalets de Pierola: En esta planta se ha puesto en marcha un proyecto piloto que utiliza IA para la monitorización en tiempo real de los flujos de residuos, mejorando la eficiencia y la calidad del reciclaje.

7. GALY: Esta empresa cultiva algodón en laboratorio utilizando un 80% menos de recursos en comparación con la agricultura tradicional, gracias a la optimización de procesos mediante IA.

Estos son solo algunos ejemplos que demuestran cómo la IA puede ser una herramienta esencial para promover la sostenibilidad y la economía circular. Su uso nos permitirá gestionar los recursos preservando la conservación del planeta y garantizando su existencia para las generaciones futuras.

El programa AI4Green para PYMES, cofinanciado por la Unión Europea, fusiona la IA con la Economía Circular, formando a los directivos de las PYMES en prácticas sostenibles. Más allá de la educación, este programa fomenta una comunidad que hace hincapié en el aprendizaje permanente, el uso ético de la IA y las asociaciones estratégicas.
Dado que la integración de la IA en la economía circular supone un obstáculo para las PYMES, la misión de este programa es capacitar a los directivos fomentando la colaboración para el aprendizaje permanente y el uso ético de la IA.