Ejemplos de empresas que luchan contra la contaminación de océanos

¿Te has preguntado alguna vez cómo las empresas pueden marcar la diferencia en la cruzada contra la contaminación de océanos? 

Sobre todo porque los océanos son el pulmón del planeta, el hogar de millones de especies y una fuente de recursos vitales para la humanidad.  

Sin embargo, están en grave peligro por la acción del hombre, que los contamina con plásticos, químicos, metales y otros residuos. 

Esta situación pone en riesgo la salud de los ecosistemas marinos, la seguridad alimentaria, el clima y la calidad de vida de las personas. 

¿Te preocupa su futuro? ¿Quieres conocer a las empresas que están comprometidas con la causa y que han convertido la sostenibilidad en su seña de identidad? Si la respuesta es sí, este artículo es para ti. 

Qué puede hacer una empresa para disminuir la contaminación de mares y océanos 

La contaminación es un problema grave que afecta a la vida marina y al equilibrio ecológico del planeta. Para reducir este impacto, una empresa puede adoptar las siguientes acciones: 

• Implementar prácticas de gestión de residuos. Nuestro consejo es establecer sistemas eficientes de clasificación y disposición para evitar que lleguen a mares y océanos.
• Promover el reciclaje. Fomentar la reutilización de materiales y la incorporación de productos reciclados en la cadena de producción contribuye a disminuir la generación de desechos.
• Utilizar tecnologías limpias. Adoptar herramientas más amigables con el medioambiente en los procesos industriales ayuda a bajar la emisión de contaminantes hacia los cuerpos de agua.
• Reducir las emisiones de CO₂ y el consumo de energía. El cambio climático provoca el calentamiento y la acidificación de los océanos, lo que altera los ecosistemas marinos y pone en peligro a muchas especies. Para ello es necesario usar fuentes de energía renovables, optimizando el uso de los recursos, y compensando su huella de carbono.
• Ayudar a cuidar las playas. Otra opción es colaborar con la conservación de las playas, participando en actividades de limpieza, educación y sensibilización. En especial, apoyando a las organizaciones que trabajan para proteger el mar.
• No comprar productos que se aprovechen de la vida marina. Algunos de ellos contribuyen al daño de los frágiles arrecifes de coral y las poblaciones marinas, como la joyería, los accesorios de pelo hechos con conchas y los derivados del tiburón. 
• Monitoreo constante. Realizar seguimientos regulares de las emisiones de la empresa garantiza que se cumplan los estándares ambientales y se evite la contaminación marina.
• Educar y capacitar al personal. En otras palabras, brindar información y formación a los empleados sobre prácticas sostenibles y la importancia de prevenir la contaminación fortalece el compromiso de la empresa con el medioambiente.
• Establecer políticas responsables. Incentivar la compra y el consumo consciente entre los clientes ayuda a reducir la demanda de productos que contaminan.
• Participar en programas de certificación. Obtener avales reconocidos por buenas prácticas ambientales demuestra el compromiso de la empresa con la preservación de los océanos y mares. 

Cómo convertir la lucha contra la contaminación de océanos en ventaja competitiva  

La lucha contra la contaminación de los océanos puede ser una oportunidad para que los negocios mejoren su competitividad, es decir, su capacidad de ofrecer productos o servicios de calidad, innovadores y rentables. Algunas actividades que se pueden realizar para aprovechar esta oportunidad son: 

1. Invertir en tecnologías limpias y eficientes. Desde sistemas de iluminación LED, paneles solares o turbinas eólicas, hasta procesos de producción más ecológicos, como la biotecnología o la economía circular.
2. Participar en iniciativas de conservación marina. Es una oportunidad para mejorar la reputación y la responsabilidad social al colaborar con organizaciones que trabajan por la preservación de los océanos, como ONG, universidades o instituciones públicas.Estas colaboraciones implican desde donaciones económicas hasta voluntariado corporativo, pasando por proyectos de investigación, educación o sensibilización.
3. Alianzas con organizaciones ambientales. Trabajar con organizaciones ambientales permite a la empresa contribuir a proyectos y campañas específicas dirigidas a la conservación de los océanos. Esta asociación puede destacar el compromiso genuino del negocio con la causa e impulsar el reconocimiento positivo.
4. Transparencia en prácticas empresariales. Lo que implica comunicar abiertamente las acciones y políticas de la organización para abordar la contaminación oceánica. Esto incluye informes regulares sobre el impacto ambiental y las medidas tomadas para mejorarlo.
5. Productos con etiquetado ecológico. Incorporar insignias ecológicas en la mercancía proporciona a los consumidores información clara sobre las iniciativas sostenible. Lo que influye en las decisiones de compra, ya que los clientes cada vez más valoran productos que respetan el medioambiente. 

Ejemplos de empresas que contribuyen a la lucha contra la contaminación de los océanos 

Como ya sabes, la contaminación de los océanos es un desafío global que requiere la participación de todos los sectores de la sociedad, incluyendo las empresas.  

Algunas de ellas han asumido el compromiso de reducir su impacto ambiental y apoyar la conservación marina, tanto en España como en el resto del mundo. Aquí te presentamos algunos ejemplos: 

• Ecoalf. La corporación española se especializa en moda sostenible y utiliza materiales reciclados, incluyendo plásticos recuperados de los océanos, para fabricar sus productos. 
• Seabin Project. Tiene su base en Mallorca y ha desarrollado tecnología innovadora en la lucha contra la contaminación marina. Sus “seabins” son dispositivos flotantes que recogen residuos plásticos y desechos de superficie en puertos.
• Adidas Parley. La colaboración entre Adidas y Parley for the Oceans ha dado lugar a una línea de productos deportivos fabricados con plásticos recogidos de playas y zonas costeras. Esta iniciativa destaca el compromiso de la empresa en abordar la contaminación plástica a nivel global.
• The Ocean Cleanup. Fundada por Boyan Slat, esta organización desarrolla tecnologías para limpiar los desechos plásticos en los océanos. Aunque no es una empresa comercial, su enfoque innovador ha atraído la atención mundial y ha inspirado la participación de diversas compañías en la lucha contra la contaminación oceánica.
• 4ocean. La compañía estadounidense se ha convertido en un líder en la limpieza de océanos. Por cada pulsera vendida, se compromete a retirar una libra de desechos plásticos del océano. Su modelo ha demostrado que la conciencia ambiental puede ir de la mano con el éxito comercial.
• Biotherm. Esta marca de cuidado personal se ha unido con la Fundación Ecoalf para lanzar el proyecto “Limpia Ríos, Salva Océanos”, que tiene como objetivo recuperar los entornos fluviales y evitar que los residuos plásticos lleguen al mar.
• Panerai. Esta firma italiana de alta relojería ha creado la colección Ecológico, que utiliza componentes de acero reciclado para fabricar sus icónicos modelos Luminor Marina. En efecto, el negocio busca reducir su huella de carbono y contribuir a la economía circular. Asimismo, colabora con la UNESCO para salvar los mares durante los próximos diez años.
• El Corte Inglés. El prestigioso almacén de moda español se ha asociado con la WWF para poner a la venta una colección exclusiva de bolsas plegables y reutilizables, que son fabricadas a partir de residuos plásticos recuperados del fondo del mar. De esta forma, pretende concienciar a sus clientes sobre la importancia de reducir el consumo de plástico y fomentar hábitos de compra más sostenibles.
• Oceana. Esta es la mayor organización internacional dedicada exclusivamente a la protección de los océanos.  

Al punto que trabaja con científicos, políticos, abogados y ciudadanos para promover políticas públicas que garanticen la sostenibilidad de la pesca, la conservación de los hábitats marinos y la prevención de la contaminación.  

Desde su fundación, ha puesto en marcha más de 100 iniciativas y protegido más de 1 millón de millas cuadradas de océano. 

Conclusión 

La contaminación es un problema que nos afecta a todos, y que requiere la colaboración de los sectores de la sociedad.  

Recordemos que los océanos son esenciales para la vida en la Tierra, y debemos cuidarlos como se merecen. Por eso, te invitamos a que te sumes a esta causa y que compartas este artículo con tus amigos, familiares y contactos. 

Este artículo se ha realizado en el marco de la Resolución de IVACE de concesión de una subvención al Consejo de Cámaras de la Comunitat Valenciana, para el fomento de la Sostenibilidad y Desarrollo Sostenible en el año 2024.