La tecnología de las centrales de CO2 está haciendo que millones de toneladas de dióxido de carbono no se distribuyan por el aire como gas de efecto invernadero.
La concentración de gases de efecto invernadero en nuestra atmósfera está provocando un aumento de temperatura en el planeta. Y es que, entre todos los gases nocivos que favorecen el calentamiento global, únicamente el CO2 ocupa casi la totalidad de las emisiones a la tierra.
La Organización Meteorológica Mundial ya advirtió sobre las altas concentraciones de dióxido de carbono en el ambiente. En 2019 alcanzaron las máximas cifras desde hacía tres millones de años.
Ante esto… ¿Cómo podemos parar las emisiones contaminantes?
Las centrales de CO2 se presentan como la alternativa verde que promete limpiar el planeta de dióxido de carbono. El mecanismo es simple: se capturan y almacenan las emisiones de CO2 para que no afecten a la atmósfera.
El procedimiento de las centrales de CO2 consiste en:
Capturar el dióxido de carbono y separarlo de otros gases que lo acompañan.
Comprimir el CO2 y transportarlo a tanques de almacenaje.
Almacenar CO2 de forma subterránea durante un largo período de tiempo.
Gracias a estas tecnologías se consigue capturar la cantidad de dióxido de carbono emitido por las industrias contaminantes, por ello es necesario ubicarlas cerca de lugares que generan muchos gases dañinos para el medio ambiente.
El dióxido de carbono no es malo en sí mismo, el problema está cuando este gas es generado de manera masiva por las empresas. Es por esto que la reducción del mismo es clave para luchar contra el cambio climático.
Algunos beneficios de las centrales de CO2 son:
Las centrales que capturan el dióxido de carbono hacen que este se concentre menos en la atmósfera, provocando que las temperaturas no sean tan altas.
Las centrales de CO2 no generan ningún impacto medioambiental, convirtiéndose en una solución verde y eficiente para limpiar el aire del planeta.
La maquinaria de captura y limpieza de CO2 no sólo se encuentra en centrales enormes. Existen sistemas modulares para sectores empresariales más pequeños.
El dióxido de carbono no sólo afecta a las personas, también a los animales. De esta forma se conserva el ecosistema.
Realmente no existen peligros en las centrales de CO2, convirtiéndola en una tecnología muy segura.
Lo cierto es que la captura y el almacenaje del dióxido de carbono es una conducta poco extendida entre los países europeos, pues muchas de las centrales de recogida de CO2 están repartidas de forma heterogénea. Aun así, estas plantas de CO2 siguen siendo una gran ayuda ante la gran crisis climática por la que está pasando el planeta.
La empresa Microsoft es una de las más comprometidas con el cambio climático. De hecho, su plan para el año 2050 es eliminar del ambiente todo el dióxido de carbono emitido desde sus inicios en 1975.
Y es que, con los millones de dólares invertidos en el Fondo de Innovación Climática con el que cuentan, están expandiendo mercado y diseñando nuevos métodos con los que reducir la huella de carbono que generan. Es por esto que Microsoft también está apostando por las centrales de CO2.
Según las encuestas del Eurobarómetro, el cambio climático representa una de las mayores preocupaciones de toda la Unión Europea. Esta delicada situación no sólo afecta a las personas, sino que también repercute en el tejido empresarial
De esta forma, los últimos sistemas en descarbonización han tenido un aumento considerable en los últimos 4 años. Además, el panorama político europeo ha agilizado los procesos de reducción de emisiones de dióxido de carbono hasta un 55% para el año 2030.
Algunos de los sectores que más generan CO2 son:
Transporte – 27%
Industria – 19%
Generación eléctrica – 17%
Agricultura – 12%
Residencial, comercial e institucional – 9%
Residuos – 4%
Refinerías – 3%
Otros – 9%
A pesar de todo, empresas como Repsol ya han afirmado que aspiran a tener cero emisiones de CO2 para el año 2050 y, junto a ella, muchas otras han seguido el camino para frenar el cambio climático. Banco Santander, Danone e incluso el aeropuerto madrileño Adolfo Suárez son algunos ejemplos más de entidades cuyas aportaciones están siendo beneficiosas para la disminución del dióxido de carbono.
Este artículo se ha realizado en el marco del Convenio de la Resolución del Consejo de Cámaras de comercio de la Comunidad Valenciana e IVACE, en favor de la difusión de la SOSTENIBILIDAD para el año 2021.
Imágenes: Unsplash y Freepik
Els ODS en els indicadors de gestió d’una empresa del sector del metall | CÁMARA VALENCIA
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