Leonardo DiCaprio lleva más de 5 años invirtiendo en una empresa sostenible que se dedica a la creación de diamantes sintéticos sin producir CO2 a la atmósfera y siendo catalogados como diamantes sin sangre.
Para entender qué son los diamantes sin sangre, primero hay que conocer qué son los diamantes de sangre. Y es que, este último hace referencia a aquellos diamantes cuya obtención es realizada en zonas de guerra o conflictos armados.
Por tanto, los diamantes sin sangre son la contra parte, diamantes obtenidos sin prácticas abusivas. Gracias al desarrollo de los derechos humanos, actividades como la esclavitud para la obtención de estos minerales están muy condenadas por organizaciones como la ONU.
La obtención de diamantes en países con situaciones políticas y sociales críticas se realiza, en muchas ocasiones, violando los derechos humanos de los ciudadanos que desempeñan el trabajo, y los beneficios obtenidos tienen como objetivo financiar los costes de las guerras en estos territorios.
Aun así, ya existen normativas en contra de los diamantes de sangre. Por ejemplo, las Naciones Unidas, junto a otros sectores, dictó una resolución en el año 2003 cuya finalidad era certificar los orígenes del diamante dentro del comercio, verificando así su legitimidad.
Esta se trata del Proceso Kimberley, una normativa en donde se especifican los protocolos a seguir en las extracciones y ventas de diamantes a nivel mundial, entre muchas otras cuestiones.
La fábrica Diamond Foundry es una de las diversas empresas en las que invierte el famoso actor Leonardo DiCaprio, quien es reconocido por películas como Titanic.
Esta compañía se dedica a la creación de diamantes sintéticos y sus objetivos van muy a la par de la sostenibilidad con el medio ambiente.
La empresa plantea invertir alrededor de 670 millones de euros en la construcción de una fábrica en territorio español, concretamente en Extremadura, Trujillo. Un proyecto innovador y nunca antes visto por las tierras de Cáceres, que traerá aires nuevos para sus ciudadanos.
Además, según se ha comentado, la fábrica gozará de 30.000 metros cuadrados de espacio, en donde se llevará a cabo todo el proceso de obtención de diamantes artificiales.
Esto dará pie a que se pueda crear un volumen importante de puestos de trabajo, rondando la creación de 300 puestos de trabajo directos.
Por último, como muestra de la preocupación real por el cambio climático y el medio ambiente, la planta de reactores de plasma obtendrá un consumo energético proveniente de la energía renovable solar fotovoltaica.
Los diamantes de sangre son un gran problema para los países que están sumidos en importantes guerras, llegando a provocar delitos como el trabajo infantil y hasta la muerte de las propias personas que trabajan en ello.
Los grupos armados obtienen importantes beneficios del tráfico de diamante ilegal, esta actividad es realizada por miles de menores y personas en situación desfavorable.
Por ello, acabar con estas prácticas es muy importante, ya no sólo por su ilegalidad sino por la defensa de los derechos humanos.
Por otro lado, los diamantes sin sangre certifican que:
La extracción de dichos minerales se ha hecho de forma segura y sin ningún tipo de abuso.
Se cumplen las diversas normativas legales sobre la extracción de diamantes y su comercialización.
Los derechos humanos no son vulnerados.
No existe explotación infantil, así como financiación a las guerras por parte de los beneficios de los diamantes.
Como se observa, la inversión en empresas que contribuyen al aumento de diamantes sin sangre es muy beneficiosa para los países que realmente sufren este problema.
Leonardo DiCaprio es un gran activista a favor de la sostenibilidad y del medio ambiente. De hecho, desde 2015 lleva colaborando con la empresa Diamond Foundry, la encargada de producir diamantes sintéticos y luchar contra la extracción de diamantes en condiciones inhumanas.
Aun así, DiCaprio también se ha visto envuelto en otros proyectos para mejorar la conservación de la biodiversidad y reducir los efectos nocivos de prácticas empresariales.
Esto lo hace a través de invertir en compañías que tienen en cuenta el medio ambiente.
Por ello, y al igual que DiCaprio, miles de inversores son conscientes del abuso al medio ambiente que supone la industria del diamante con sus contaminaciones para la atmósfera y el planeta. Y es que, la minería de diamante no sólo expulsa CO2 al aire, pues también destruye ecosistemas.
Este artículo se ha realizado en el marco del Convenio de la Resolución del Consejo de Cámaras de comercio de la Comunidad Valenciana e IVACE, en favor de la difusión de la SOSTENIBILIDAD para el año 2021.
Imágenes: Unsplash y Freepik
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