Durante décadas se ha prosperado con una gran industria que ha servido para dotar a las personas de todo tipo de objetos materiales, por el contrario, ha destruido el medio en el que vive. Todo lo que consumimos está producido en serie o es un recurso limitado, la ISO 20400 está destinada a buscar el equilibrio con un consumo responsable.

La compra sostenible es una realidad gracias a la ISO 20400. Destinada a todo tipo de organizaciones o empresas sin importar su tamaño. El consumo es una realidad para todos que debe empezar a encontrar una razón de ser o un freno que permite coger aire al planeta o al menos que pueda respirar mejor.

En 2017 la Organización Internacional de Normalización (ISO) publicó la ISO 20400 su misión era orientar y reconocer a aquellas organizaciones que apuestan por la sostenibilidad en sus compras. Desde hace unos años se ha convertido en un básico que ha supuesto un apoyo a las empresas que necesitan realizar las compras adecuadas. 

20400 definen internacionalmente conceptos como comportamiento ético, responsabilidad social, desarrollo sostenible, prácticas operacionales justas, además no puede ayudar a alcanzar los objetivos de las políticas públicas. Esta norma llega después de uno de los hechos que hicieron despertar al mundo entero.

La compra sostenible no es sólo apostar por un producto local, de calidad y con ciertas cualidades que se adapten a la normativa.

Un antes y un después que generó una norma capaz de darle a cada empresa el sello necesario. Dejando atrás una época de grandes errores a la hora de producir, del precio más bajo para obtener el máximo beneficio, se pasó a un beneficio justo. Una prenda que no durará solo una temporada, sino que alargará el ciclo de vida. Mejores condiciones para la producción y el concepto del producto que vivirá durante más tiempo.

Toda empresa necesita analizar paso a paso la manera que hace las compras para poder implementar ISO 20400.

• Examina el producto que compras. Mira bien qué necesitas, si encaja bien, si tiene un diseño o un origen sostenible.
• Conoce la cadena de producción de este producto. La forma de producir debe ser la más respetuosa posible.
• Trabaja con el proveedor para asegurar el ciclo de vida. Un posible reciclaje o una forma de darle un segundo uso a ese producto o envase.

Saber qué estamos comprando, cómo se usará y la repercusión de este producto en el medio ambiente es la piedra filosofal de esta nueva era. Empieza el mundo sostenible y llega de la mano de ISO 20400 a las organizaciones y empresas. 

Este artículo se ha realizado en el marco del proyecto: Rsircle 21, financiado por la Conselleria de transparencia, responsabilidad social, participación y cooperación de la Generalitat Valenciana y Caixa Popular.