Con una simple búsqueda en internet estamos contribuyendo a una industria que produce millones de toneladas de dióxido de carbono a la atmósfera, un gas que favorece el calentamiento global del planeta.
Los denominados Centros de Proceso de Datos (CPD) son unas instalaciones en donde se ubican los recursos, las herramientas y la tecnología adecuada para el procesamiento y guardado de la información digital.
Por lo general, suelen ser salas de gran tamaño, cuyos objetivos consisten en mantener grandes equipos informáticos y electrónicos para el buen funcionamiento de las actividades relacionadas con el CPD.
De hecho, este es uno de los grandes problemas que existen en los Centros de Procesos de Datos, puesto que el gran desempeño de los aparatos electrónicos provoca una gran contaminación hacia el medio ambiente.
Estamos hablando de que la huella carbono desprendida de estas instalaciones se acerca al 2% de CO2 liberado a nivel mundial, igualando al sector de las aerolíneas. Además, la mala eficiencia y gestión de estos centros provoca el desperdicio del 90% de su energía eléctrica.
Otro punto a tener en cuenta es el sellado de las infraestructuras de los Data Centers, puesto que, muchos de estos, en países como Chile, Colombia, Perú, Argentina, etc., no cuentan con los certificados suficientes para el desarrollo óptimo.
La realidad escondida en internet es que con cada búsqueda realizada se está contribuyendo a la contaminación de la atmósfera producida por los Centros de Proceso de Datos, los cuales expulsan cientos de millones de toneladas de dióxido de carbono.
A pesar de todo, se está trabajando en nuevas formas sostenibles para desarrollar un trabajo menos contaminante en estos centros. Una de las técnicas usadas que se está implementando son los algoritmos verdes.
Por algoritmo entendemos las instrucciones que se encargan de proporcionar los datos a los usuarios de internet que lo requieran. Por tanto, el algoritmo verde recoge este concepto, pero aplicándole un objetivo de conciencia ambiental y reducción de huella de carbono en el planeta.
En términos generales, el algoritmo verde está diseñado mediante inteligencia artificial para ser más eficiente en las búsquedas y obtención de los datos, reduciendo el tiempo de uso de energía y de consumo eléctrico.
Y, además de consumir menos recursos, este proceso inteligente también tiene en cuenta sus propios costes, aprendiendo con cada procesamiento y mejorando los ciclos de búsqueda.
La famosa transición energética y la transformación digital son dos términos que van muy de la mano, una cuestión decisiva que hará posible la sostenibilidad en los Centros de Procesamiento de Datos.
Y es que, las búsquedas de internet en un futuro serán mucho menos contaminantes como consecuencia de los grandes avances que, poco a poco, se están desarrollando en el área de los Data Centers.
Algunas prácticas que ayudan a una mejor sostenibilidad son:
Realizar informes sobre la electricidad interna generada de los componentes electrónicos.
Aprovechar todos los recursos al máximo.
Contar con una distribución eléctrica de corriente continua en todos aquellos casos donde sea posible.
Utilizar tubos LED en lugar de luces fluorescentes, puesto que los primeros consumen mucho menos energía, ocasionan mucho menos calor y brindan una óptima iluminación.
Por el momento, únicamente los centro de datos más sostenibles hasta la fecha se encuentran en Islandia, quien asciende como uno de los países más importantes para instalar un Data Center ecológico, puesto que se puede cumplir con los requisitos de enfriamiento, ya que su tiempo es totalmente frío; y su fuente de energía sostenible es geotermal.
La inteligencia artificial verde es una de las grandes innovaciones que se están aplicando en los Centros de Procesos de Datos, así como en otras áreas importantes. Su principal objetivo se resume en ayudar a mejorar la sostenibilidad de estas instalaciones.
La Green IA de los nuevos algoritmos tendrá en cuenta muchas más características o factores con los que mejorar los procesos de cualquier tipo, ya sea desde sectores empresariales, transporte, IT, etc.
Además, una gran característica es que buscarán ser mucho más eficientes para ahorrar energía o disminuir los residuos contaminantes el máximo posible. Así como malgastar el mínimo agua o encontrar soluciones a todo tipo de desafíos complejos que desafíen la sostenibilidad del medio ambiente.
Esto se debe a que un ordenador cuántico es capaz de resolver los problemas de cálculo aprovechando diversos fenómenos físicos con los que conseguir un tiempo procesamiento mucho menor en el algoritmo, superando por mucho a los ordenadores clásicos.
Este artículo se ha realizado en el marco del Convenio de la Resolución del Consejo de Cámaras de comercio de la Comunidad Valenciana e IVACE, en favor de la difusión de la SOSTENIBILIDAD para el año 2021.
Imágenes: Unsplash y Freepik
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